– No pude verte crecer, no pude conocerte bien, pero aún así eres y serás siempre a quien en este mundo más amaré. Que descanses en paz mi pequeño bebé.
.- Te fuiste y te llevaste una parte de mi contigo, vuela alto mi bebé bendecido, Dios te está esperando en el cielo y yo añoraré toda la vida el momento de volver a vernos. Te amo bebé adorado, ángel dorado.
.- Eres un ángel tan puro que este mundo no te merecía, por eso regresaste al cielo donde pertenecías bebé, aún así te extraño y siempre te extrañaré.
.- Descansa en paz mi bebé y vuela muy alto, juega entre las nubes porque siempre estaré observando, espero que me observes también a mí, desearía que no te hubieras ido y que estuvieras aún aquí.
.- Me rompe el corazón despedirme de ti cuando ni siquiera mucho tiempo pudimos compartir. Solo me consuela saber que Dios te tiene en su seno porque a ningún otro lugar podría ir el alma de un bebé tan puro y bueno.
.- Esperaba con ansías tu llegada y tuve que soportar tu pérdida que me ha dejado desolada. No pude conocerte o verte crecer pero con seguridad siempre, con todas mis fuerzas te amaré, que Dios te colme con su gloria bebé.
.- Sé que Dios está contigo y que estará cuidándote mi hermoso bebé perdido, descansa en paz, juega en el cielo sin parar.
.- Mi dolor es muy grande debido a tu partida, pero el haberte tenido en mi vientre, el haber podido sentirte me hace la persona más bendecida. Lamento tu pérdida pero siempre estaré agradecida, siempre tendré presente lo especial que me hiciste sentir.
.- Todos estábamos muy ilusionados esperando por tu llegada y tu muerte inesperada nos tomó por sorpresa, nadie debería recibir una noticia como esa. Nuestro único consuelo es que sabemos que volviste al cielo junto a Dios, que jugarás entre las nubes con pequeños querubines como tú, libre y feliz.
.- Dios te ha llamado pero aquí siempre serás nuestro ángel adorado, nadie ocupará tu lugar, te extrañamos y te extrañaremos por siempre, ojalá lo supieras y recordaras eternamente.
.- Siempre es difícil despedir a un ser querido pero parte el alma despedirse de un recién nacido que no ha podido disfrutar de la hermosura del vivir. Es un dolor tan grande que sientes que te va a destruir, pero tienes que seguir, puedes hacerlo, le entrañarás siempre pero el dolor disminuirá con el tiempo, ten fe.
.- Triste y desolador es perder a un bebé que tuviste la oportunidad de sentir moverse en tu vientre, creo que no hay dolor más grande que ese, el de una madre que estaba ilusionada y que luego tiene que lidiar devastada con la pérdida de su angelito, solo pido paz para tu alma aunque sé que ya la tienes porque eres puro e inocente, ibas a ser un ángel viviente.
.- Estábamos preparados para velar por tí no para que tú velaras por nosotros desde el cielo, pero la vida tenía otros planes, descansa en paz bello ángel.
.- Me cuesta asumirlo, me parte el alma tu pérdida, pero sé que un ángel tan puro como tú era demasiado bueno para vivir en esta tierra. No te merecíamos, pero te amábamos igual y lo haremos por siempre, por toda la eternidad.
.- Ningún dolor en este mundo se compara al de haber llevado en tu vientre a un bebé adorado y que después no hayas podido ni llevarlo a casa. Aún así la dicha de haberlo tenido contigo un corto tiempo prestado te da algo de consuelo. Que seas feliz en el cielo, bebé.
.- Oremos por los familiares de los bebés fallecidos, de los bebés que murieron antes de nacer o de los que nacieron y no se quedaron, oremos por la sanación de su corazón destrozado y porque hallen la paz, porque descubran que en realidad sus bebés eran demasiado perfectos para vivir en este mundo imperfecto, que ellos merecían el cielo.