Deseo que alcances tus sueños en lo mejor de la excelencia, superarás retos, enfrentarás pruebas, pero sé que te esforzarás para lograr tus objetivos. Dios te bendiga y un ¡Feliz cumpleaños mi amada hija!
El mejor regalo que Dios me ha dado eres tu hija mía, verte crecer es lo más maravilloso que me ha pasado, saber que sigues los pasos de nuestro señor me hace sentir la madre más afortunada del mundo. Que Dios te bendiga y te guarde. ¡Feliz cumpleaños!
Doy gracias a Dios por darme el privilegio de ser tu madre, celebro tu cumpleaños dándole muchas gracias a Dios, eres una hija ejemplar y temerosa de Dios. ¡Te deseo muchas felicidades! ¡Te amo!
Para ti mi hija hermosa en este día tan especial quiero desearte un feliz cumpleaños, que sigas guardando la palabra de Dios en tu corazón, que guie tus pasos y te llene de sabiduría.
Mujer virtuosa, ¿Dónde se hallara? Es más valiosa que las piedras preciosas. Proverbios 31.10. Así eres tu hija mía, mujer llena de gracia y bendiciones de Dios. ¡Feliz cumpleaños!
Engañoso es el encanto y pasajera la belleza; la mujer que teme al señor es digna de alabanza. Proverbios: 31.30. Feliz cumpleaños hija mía, sé que eres una mujer temerosa de Dios y que siempre cumples los preceptos del señor. Pido al creador que te bendiga grandemente.
El don más hermoso que Dios nos regala son los hijos. Te aseguro hija que naciste para triunfar, tu secreto está en que guardas las palabras de Dios en tu corazón. Pon tu confianza en él y él te llevara por caminos de buenas noticias y de bien. ¡Feliz cumpleaños!
Pido a Dios que coloque en tu camino personas sanas, que te ayuden a creer en ti, a crecer y a valorar tu maravilloso ser. ¡Felicidades en tu cumpleaños!
A Dios le pido, que te proteja de todo peligro, a no perder la fe, a levantarte cada día con optimismo y a enfrentar cualquier desafío con elegancia. Mi amada hija te deseo muchas bendiciones y ¡Feliz cumpleaños!
Querida hija, pido a Dios que te brinde la sabiduría para que con amor te enseñe a ser una gran amiga, puedas escuchar sin pretender, aconsejar sin imponer, hablar sin ofender y amar sin retener. ¡Feliz cumpleaños!
Construye tu vida sobre las bases del señor tu Dios, así cuando venga la tormenta saldrás victoriosa, no pierdas tu fe, ni tu esencia, ni tu razón de ser. ¡Feliz cumpleaños mi adorada hija!