No tiene por qué dar las gracias, para mí es todo un placer el poder haberle servido de ayuda en este apuro.
Gracias son las que las adorna señora. Agradecido yo de poder servir a uno de los angelitos que Dios ha mandado a este mundo para adornarlo con su belleza.
No hay nada que agradecer amigo, yo simplemente hice lo mismo que tú harías por mí de yo estar en la misma situación.
No se preocupe, estoy feliz de poder ayudar en cualquier cosa en que pueda hacerlo. Con gusto lo volvería hacer si me volviera a pedir.
Frases para responder cuando te dan las gracias
Feliz estoy de poder hacerlo y ver dibujado en su rostro esa sonrisa, que es mi mayor recompensa.
Realmente no fue nada, es algo que estaba a mi alcanzaba y no me costaba nada el poder hacer el favor que me solicitaba. Siempre he dicho que cualquier bien que se pueda hacer hoy no se puede dejar para mañana.
Tranquilo ¡todo bien! No tienes por qué darme las gracias, no ha sido una molestia para mí, más bien he disfrutado mucho el poder ayudarte.
No es necesario dar gracias, para eso estamos los amigos. Cuenta conmigo para lo que necesites. Que mientras yo pueda no hay problema.
¡Para nada! Me hubiera sentido ofendido sino me hubieras pedido la ayuda. Para eso estamos los hermanos para apoyarnos en buenas o en malas, porque lo que a ti te preocupa a mí también me preocupa y si en mis manos está el que dejes de preocuparte, se hace.
¡Tranquilo! No pienses en ello, que si tuviera que volver hacerlo, ten la plena seguridad que lo volvería hacer sin chistar.
¿Qué es eso amor? No tienes que darme las gracias, tú sabes que tus problemas son los míos y el ayudarte a ti me estoy ayudando a mí.
¡De nada! Siempre dispuesto a servirle con el mayor de los entusiasmos y mientras esté a mi alcance
¡No me des las gracias! Como no hacerle un favor a una persona a la que le debo tanto, no hacerlo sería una grosería de mi parte y un mal agradecido.
¡No! Gracias a ti por permitirme hacerte un favor, que para mí es una bendición. Hacerte un favor a ti es como hacerle un favor al cielo, que siempre has estado allí cuando lo necesito.
No fue gran cosa amigo de verdad. ¡no tiene por qué dar gracias! Simplemente cumplo con mi trabajo.
¡No hay de qué! Estoy feliz de poder servirle y de que usted disfrutara de cómo le he servido. Por aquí siempre estoy a la orden
No hay porque dar gracias, yo se que tu hubieras hecho lo mismo por mí, así que estoy complacido de ser yo quién pudo ayudarte esta vez.
¡Tranquilo! Una mano lava la otra y yo te debía desde hace tiempo un favor. No tienes nada que agradecer.
De nada amiga. Siempre dispuesto para ayudar a una chica tan hermosa como tú. Mientras pueda y tú sigas tan bonita no hay problema.
De nada, espero que puedas disfrutarlo tanto como yo he disfrutado, el poder regalártelo. Perdona que no hubiera podido regalártelo antes.
Me encanta que te sientas complacido con mi regalo, no tienes porque agradecerme nada. Disfrute mucho consiguiéndolo para ti.
Lo hice de corazón para alguien especial como tú. No me des las gracias y cuando pienses que te pueda ayudar con algo, simplemente dímelo y no se diga más.
¡No hay de que! Siempre he predicado que las buenas acciones hacen corazones y que cuando uno puede ayudar a darle un poco de felicidad a otra persona, debe hacerlo sin dudarlo.
El mejor agradecimiento que puedo recibir de ti es una sonrisa para ser feliz y ya me has dado unas cuantas. ¡Qué más puedo pedir!
Si te hace sentir bien, no tienes necesidad de dar gracias. Me alegró el poder ayudarte.
El placer ha sido todo mío, no sabes cuánto me complace que todo saliera bien y concluyera en buen término.