Fantasías excitantes, deseos inconfesables y un solo protagonista: Tú.
Mis fantasías más pervertidas tienen un solo protagonista. Tú.
Protagonizas todas mis fantasías. Te necesito cada día más.
Me tocas y mi piel se enciende en llamas. Menos mal que también eres el que puede apagarlas.
Me derrito cuando te veo, cuando te pienso, cuando me comes a besos. Te quiero para mí todo el tiempo.
Un vicio del que no me cansaré jamás. Placer, lujuria, felicidad… Tú y nadie más.
Me besas y me siento en el cielo. Me tocas y experimento las mismas llamas del infierno… Me encantas.
Quédate conmigo. En mis brazos, debajo de mí, en mi regazo… Pero siempre a mi lado.
Dulce de trato pero pervertida entre tus brazos.
Seamos llamas en la oscuridad, ardamos hasta no poder ya más.
Quiero tocarte despacio, recorrer cada parte de tu piel, amoldarte al placer, ser el único al que quieras tener. Pienso dejar huella en tu ser.
Te quiero a veces suave, a veces despacio, a veces duro y rápido… Pero sólo a tí.
Contigo: Dulce, amorosa, atrevida, lujuriosa, pervertida… Contigo todo en esta vida.
Culpable eres de mi actual perversión. No puedo dejar de quererte, de desearte, quiero probarte a toda hora y en todas partes.
Bésame, tócame, muérdeme, azótame… Hazme instrumento de tu goce. Seré tuya en cualquier pose.
Quería ser fría pero la piel se me derrite si me tocan tus manos divinas.
No importa si no puedo ser tu amor. Seré entonces tu vicio, tu tentación, tu pecado, tu perdición.
Quiero ser más que tu amor, quiero ser tu droga, tu adicción, que desees a todas horas mi sabor.
El toque de tus manos de mi mente y piel no puedo borrarlos.
Cansado estoy de hacerte el amor en mi imaginación. Dame una oportunidad de mis sueños hacer realidad. Te elevaré a las alturas, no lo olvidarás jamás.
Entre tú y yo la ropa siempre sobró.
Y la luz se apagó y el demonio del deseo surgió. En llamas nos consumimos los dos. Así es nuestra bonita historia de amor y perversión.
Para tí lujuriosa, pervertida, juguetona. Me encanta como esas facetas de mí te alocan.
Tú me llevas más alto que cualquiera. Me tocas y me siento fuera de la faz de la Tierra.
Te transformas en la cama, de ángel pasas a ser villana, pervertida, una diabla… Me encantas.
Que tu piel se erice con mi toque es placer y felicidad… Sé que en tí he dejado una huella duradera.
Por esos orgasmos que entre ambos nos obsequiamos. Con nada en esta vida puedo compararlos.
Complacerte hasta hacerte gritar de cualquier forma que quieras. Es mi mayor deseo en esta Tierra.
Afloras mi lado pervertido. Lo quiero hacer de todas las formas posibles contigo.
Chica mala, pervertida, insaciable y diabla… Perviérteme con tus fantasías en el sofá, en la cama, donde quieras… Pero no me dejes con las ganas.
Hambriento estoy de tí. Quiero tocar y morder cada parte de tu piel; perderme en tu esencia para nunca más volver.
En mis fantasías más oscuras, en las más pervertidas, en aquellas por las que siento más gula… Tú siempre estás… Te deseo como nunca he deseado a nadie más…
Eres explosión, éxtasis, satisfacción, deseo… Mi dulce tentación.
Te deseo todo el tiempo. Te quiero tener en todas las posiciones posibles en este momento. Eres mi tormento. Mi infierno personal. Pero tú sabor es dulce, mejor que cualquier droga…
Infierno, pecado, tentación, perdición… Parece como si fuera malo pero eso eres y me tienes encantado.
Entre tus brazos descubrí un placer inigualable. Me volviste insaciable.
Puede que nos estemos separando pero sé que volverás cualquier día por mis incomparables orgasmos.
Te lo haré tan delicioso que gritarás mi nombre. Haré que este de tu mente jamás se borre.
Quiero ser tu amor, pero si no se puede seré el fuego que desate tu pasión, tu pecado, deseo salvaje, sexo alocado…
Salvaje, arrasador… Así es el deseo que me quema cada vez que te miro.
Dicen que hacer el amor alarga la vida ¿Me harías el honor de ser mi compañero en la inmortalidad? Hagámonos inmortales juntos.
Te saborearé despacio porque eres el bombón que más he añorado.